El Día del Árbol puede ser el motivo para reflexionar, ya que la vida moderna nos ha llevado a olvidarnos de que cada uno de nosotros somos parte del ecosistema y que nuestra vida depende del entorno en que vivimos, por tanto, debemos crear conciencia de la necesidad imperiosa de educarnos y educar a nuestros hijos en la importancia que tiene el árbol para nuestras vidas.
Los árboles son esenciales para la vida en nuestro planeta, ya que estos purifican el ambiente al oxigenar el aire, nos dan sombra, refrescan y humedecen el ambiente, reducen el ruido, detienen las heladas por su follaje, transforman el dióxido de carbono, responsable del efecto invernadero, del biomasa, minimizan los riesgos de inundación, evita la erosión.ÂÂÂÂÂÂÂÂÂÂ Además producen alimentos y múltiples recursos. A pesar de todo ello, no son valorados como debería.
El hombre desde el principio de su existencia ha sacado provecho al árbol, estando ligado a la naturaleza y esta relación le daba significado a su vida. Las montañas, los ríos, las playas, etcétera, han sido contemplados y aprovechadas por el hombre. Siendo una fuente de vida con recursos inagotables para la humanidad.
El árbol tiene un importante valor económico, ya que de él obtenemos distintos materiales comercializables. La madera se utiliza como tablas para la construcción; su pulpa permite la confección de una gran diversidad de papeles; además proporciona el corcho, las resinas y el látex -líquido segregado por algunos árboles, como el del caucho-, las gomas, los barnices, el tanino, la cola, el lápiz, etc
.A todo lo anterior, hay que sumar la importancia de los árboles frutales, cuyo cultivo se inició la primera vez que se plantaron semillas deliberadamente. Desde entonces, se han mejorado las calidades y creado nuevas variedades. Por ejemplo, de la manzana, que en su forma silvestre es pequeña y amarga, el hombre ha creado más de mil variedades, mucho más grandes y dulces.
Debido a los avances que ha logrado el hombre, hemos perdido la capacidad de poder observar los grandes beneficios que nos ofrece los árboles, ya que no tenemos tiempo para ver el nacer de una flor, el renacer de la primavera, el caer de las hojas en otoño y muchas otras maravillas.
¿Qué podemos hacer?
Educarnos para un cambio cultural, donde el hombre forme parte de un ecosistema que involucra a toda la naturaleza, y donde el bienestar de todos sus componentes nos llevará a mejorar la calidad de vida, y a frenar la destrucción del planeta y de nosotros mismos.
Para empezar podemos celebrar el Día del Árbol realizando las siguientes actividades: plantar un árbol y aprender a cuidarlo; excursión familiar en la naturaleza; descubrir las características de los árboles recorriendo el viejo cauce del río Turia…